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Microsoft 365 dejará de recibir nuevas funciones en Windows 10 a partir de 2026

July 27, 2025

Microsoft ha anunciado un cambio significativo que impactará a millones de usuarios en todo el mundo. A partir de agosto de 2026, las aplicaciones de Microsoft 365 dejarán de recibir nuevas funciones en dispositivos con Windows 10. Esta medida marca un paso clave en la estrategia de transición hacia Windows 11, sistema operativo en el que continuará el desarrollo activo de herramientas, mejoras y funcionalidades avanzadas.

¿Qué significa dejar de recibir nuevas funciones?

Aunque Microsoft 365 seguirá siendo compatible con Windows 10 y recibirá parches de seguridad hasta el 10 de octubre de 2028, los usuarios dejarán de obtener cualquier tipo de innovación o mejora funcional. Esto incluye nuevas herramientas impulsadas por inteligencia artificial, mejoras de rendimiento, cambios en la interfaz, automatizaciones, nuevas integraciones y funcionalidades que mejoran la colaboración y accesibilidad.

Mientras los usuarios de Windows 11 seguirán recibiendo estas novedades, quienes permanezcan en Windows 10 verán sus aplicaciones “congeladas” tal como están actualmente. Por ejemplo, herramientas como Copilot, que aprovechan la IA para agilizar el trabajo, seguirán evolucionando exclusivamente en Windows 11.

Fechas clave para distintos tipos de usuarios

Microsoft ha establecido fechas límite específicas para los distintos canales de actualización de Microsoft 365:

  • Usuarios personales y familiares (canal actual): hasta agosto de 2026
  • Empresas con canal mensual: hasta el 13 de octubre de 2026
  • Empresas con canal semestral: hasta el 12 de enero de 2027

Después de estos plazos, Microsoft 365 en Windows 10 únicamente recibirá actualizaciones de seguridad y correcciones de errores. Las nuevas funciones solo estarán disponibles en Windows 11.

¿Qué tipo de funciones dejarás de recibir?

La pérdida afectará a todas las aplicaciones principales de Microsoft 365: Word, Excel, Outlook, PowerPoint, entre otras. Algunas de las funcionalidades que ya no llegarán a Windows 10 incluyen:

  • Herramientas impulsadas por inteligencia artificial como Copilot
  • Nuevas opciones de colaboración en tiempo real
  • Accesos más rápidos y automatizados
  • Rediseños de interfaz más intuitivos
  • Mejoras de accesibilidad y personalización

En resumen, si deseas acceder a las últimas innovaciones de productividad, deberás migrar a Windows 11.

¿Por qué Microsoft toma esta decisión?

Microsoft está centrando sus recursos en Windows 11, su plataforma más moderna y segura. Seguir desarrollando funciones para Windows 10 —un sistema operativo cuyo soporte completo finalizará en octubre de 2025— implica un esfuerzo duplicado que ya no resulta viable ni eficiente.

Unificar el desarrollo sobre una única base tecnológica (Windows 11) permite a Microsoft acelerar el ritmo de innovación y ofrecer una experiencia más consistente y optimizada a sus usuarios.

¿Qué pasa si decides quedarte en Windows 10?

Si optas por seguir usando Windows 10, las aplicaciones de Microsoft 365 seguirán funcionando normalmente. Sin embargo, solo conservarás las funciones actuales y no podrás acceder a ninguna novedad futura. Tampoco podrás aprovechar las mejoras en servicios en la nube o herramientas integradas de inteligencia artificial, elementos que Microsoft está incorporando de forma intensiva en su ecosistema.

¿Y el soporte de seguridad?

Microsoft continuará brindando actualizaciones de seguridad para Microsoft 365 en Windows 10 hasta el 10 de octubre de 2028. Esto significa que, aunque no recibirás nuevas funciones, tu entorno seguirá protegido frente a vulnerabilidades y amenazas.

Recomendación: prepárate para migrar

Ante este escenario, Microsoft recomienda que los usuarios comiencen desde ahora a planificar su transición a Windows 11. Para ello, es importante verificar si tu equipo actual cumple con los requisitos mínimos del sistema. En caso contrario, podrías considerar actualizar tu hardware.

Migrar a Windows 11 no solo garantiza soporte y seguridad, sino también acceso continuo a nuevas funciones que aumentan tu productividad y experiencia de usuario. Quedarse en Windows 10 implica perderse la evolución del ecosistema Microsoft, cada vez más centrado en la inteligencia artificial, la nube y la eficiencia digital.